¡Cómo me inspira Monet!
Este fabuloso ser tenía varios talentos entre ellos experimentar, perseverar, ponerle humor a las cosas, ser buen amigo, enamorarse con el corazón, sentir profundamente, sorprenderse y el que a mi más me gusta de todos, encontrar la irradialización de la luz.

Todo lo que pintaba era excusa para buscar esa luz que al final, producía la impresión de la forma que se revelaba ante los ojos del espectador. Basta en-frentar uno de sus cuadros con la mente limpia para entender este concepto. Y si la mente no está limpia, la luz del cuadro se encarga de hacerlo. Sin lugar a dudas, el observador sale diferente.

Compinche de #Renoir y de #pissarro, paciente con el complejo de #Rodin que no era una perita en dulce, pasó las duras y maduras hasta convertirse en uno de los padres del #impresionismo. Madre también, porque un movimiento, por ejemplo, artístico, se gesta y se da a luz.

Cuando logró un poco de estabilidad económica, en 1890, compró su famosa casa en #Giverny, esa a la que le construyó el puentecito japonés, llenó de nenúfares, sembró su huerto, cultivó flores de todo tipo y practicó lo que más le gustaba en la vida, pintar "en plein air".
Hasta 1926, cuando falleció, realizó infinidad de cuadros muy diferentes uno del otro pero con igual sujeto. Infinidad de formas de ver su jardín. Así, de la misma manera que tendría que ser vivida la vida: la propia mirada que se re-crea para después re-crear el entorno y no al revés.
Yo que te percibo de mil maneras y entonces me adueño de mi felicidad, responsabilidad personal.

En noviembre de 2019 le pregunté a mis grupos de los #creativitylab en #Barcelona cual había sido la sesión favorita de tantas cosas que hicimos por años. La mayoría recordaba con inmensa alegría la vez que emulamos el lienzo de 4 metros llenos de nenúfares de #ClaudeMonet, uno de esos que le regaló al Estado francés en 1920. Yo también amé esa clase.
Ayer, tuve la dicha de volver a contemplar sus lienzos gigantes, curveados y repletos de magia en el @museeorangerie de #Paris. Sus nenúfares nunca son las mismas. Ahí está parte del encanto de Monet.